SATURADOS Y OKUPADOS

Mientras la Yoli me recuerda el lema de Hamás con su “Desde el rio hasta el mar” y el marido de Begoña a Luis XIV con su “L'État, c'est moi”, me tomo una jornada de relajación. Mientras los partidos y agrupaciones inician su campaña de las Europeas, desconecto del ambiente y nos dirigimos a un circuito SPA con su noche de hotel correspondiente.

El Audax es el destino de referencia.  Un lujo de instalaciones y muy buen trato de su personal. No es la primera vez que los Reyes nos invitan a un circuito con noche incluida.  Tal vez por eso sigo siendo monárquico, aunque tengo que reconocer que últimamente tengo debilidad por Pilar Rahola.  Y por García-Margallo. Y por Risto Mejide. Qué le vamos a hacer.

El aparcamiento de Cala Galdana empieza a estar saturado.  Y aún no es verano.  No quiero pensar cómo estará en julio ni en agosto.  Y no solo Cala Galdana, que va.  Pienso en Es Grau.  Y aunque el Govern Balear autorice a ampliar aparcamientos, no creo que ciertos ayuntamientos quieran usar alguna tanca en desuso para tal fin. Sin duda, excusas de mal pagador.  Primero por la falta de tiempo.  Segundo por el impacto ecológico.  Tercero por aquello de la movilidad sostenible. Cuarto porque etcétera es etcétera. Y quinto porque se habrá ya terminado el verano.

Se acabó la fiesta, dirán unos.  Eso mismo dirá Alvise Pérez en su eslogan electoral. Todos contra Alvise parece ser la consigna del resto.  Todos contra todos parece ser la realidad.

La otra realidad es la ya conocida.  Nace la “Vía Menorca” con los rostros y apoyos de siempre.  No me sorprende que viej@s comunicador@s se adhieran.  Vamos, como con la llegada de Alfonso XII a Madrid.  Veraneantes peninsulares con segunda residencia que o bien promueven el turismo o bien apuestan por la regulación.  El viento sopla, sí. Y bastante. Y los cambios de opinión.  Y las necesidades personales, también.

Terminas la jornada de relax y pagas la ecotasa.  Y te preguntas cómo es posible que la paguen sólo quienes pernoctan pagando.  ¿Por qué no la pagan todos quienes entran en la isla? ¿Acaso no la saturan los usuarios de las autocaravanas y los famosos okupas televisivos? ¿Acaso no la saturan los temporeros y las segundas residencias foráneas?

Vamos, que este año ni regulación ni prohibición.  Prohibición sí, de aparcar en algunas playas, eso por descontado.  Al menos hay cambios a la vista. La “Mesa por el pacto social y político por la sostenibilidad económica, social y ambiental” puede ser la apuesta para el futuro.

PUBLICADO EL 30 DE MAYO DE 2024, EN EL DIARIO MENORCA.

CRISPACIÓN

 

Si acudimos al diccionario de la Real Academia de la Lengua, crispación es la acción y efecto de crispar o crisparse.  Y éste, define como crispar al efecto de irritar o exasperar a alguien.  Vamos, que lo que dijo el ministro Albares de que el atentado de Eslovaquia es síntoma de la crispación "que está recorriendo Europa y también España”, puede incluso ser cierto.

Y dijo más. Afirmó que desde el Gobierno se lleva tiempo advirtiendo de esa crispación. Y sostuvo que esas actitudes agresivas se producen "cuando uno convierte al político en enemigo".  Y aunque sea un ministro del marido de Begoña Gómez, debo darle la razón. Toda la razón.

Esta crispación no es de ahora, no.  Alguien dirá incluso que la inventó Zapatero, en aquella entrevista con Gabilondo, cuando admitió que “lo que pasa es que lo que nos conviene es que haya tensión”.  Otros atribuirán el invento a Pablo Iglesias y su entorno de Podemos con aquello del “jarabe democrático”.  Y si alguno no tiene miedo con encontrarse con los fantasmas del pasado y retrocede a la memoria de la historia aún no censurada, incluso encontrará alguna frase del histórico Largo Caballero de los años treinta y pocos, que pondría los pelos en punta a algún calvo.

Pero no.  El enemigo que batir es la derecha.  Basta escuchar algunas declaraciones representativas del Gobierno español traspasando la culpa de esta crispación a la derecha y extrema derecha europeas. Incluso después de identificarse al autor del intento de magnicidio contra el primer ministro eslovaco como un militante pacifista.   Tampoco son capaces de reconocer que precisamente, en España, los presidentes que perdieron la vida en función de sus cargos representaban precisamente al sector conservador.  Vamos, que la perdieron a manos de simpatizantes -por llamarlo de forma suave- de los progresistas….

Habrá también quien identificará al Pacto del Tinell como el inicio de esta tensión entre los grandes partidos españoles, al proclamarse el total rechazo de la izquierda a cualquier negociación con la otra España a la que tan alegremente se refieren quienes ven el periodo de la transición como un retroceso en vez de un avance.

Negar el consenso es negar el diálogo.  Negar el diálogo es negar la otra verdad.  Negar la otra verdad, es sin duda, negar al otro.  Y si estamos solos, ya no necesitamos consensuar nada.  Así funcionan algunos países.  Unos más que otros y con un 70 % de la población mundial. Y no parece que vaya a disminuir.

Algunos de derechas, sí.

PUBLICADO EL 23 DE MAYO DE 2024, EN EL DIARIO MENORCA.

BASURA ITINERANTE

 

En la esquina de enfrente de casa existen dos contenedores de basura, de los verdes, de los que engullen de todo, desde escombros al monitor que la obsolescencia programada deja sin vida y a los bolsillos sin tela. Vamos, los contenedores más buscados por el reiterado infractor en la cosa de las tres erres.  Tienen la fecha de caducidad a principios de noviembre.  Serán, eso sí, de los últimos de la hermosa y galante ciudad.

Desde hace ya tiempo, estos contenedores reciben la visita matinal programada de unas furgonetas externas a la barriada.  Son visitas, es de suponer itinerantes en sus inicios, regulares y programadas en su final.

Soy de los que se adaptan. Tal vez más por miedo que por convicción en el inicio, pero que acabo por convencerme al final.  Un progreso adecuado, aunque lento.  Me conozco los colores de los contenedores, he hecho uso del servicio de recogida de enseres y de la “deixalleria” y aunque debo confesar que soy de los que no separan las cerdas del propio mango del cepillo de dientes, conozco que hay diferencia entre vidrio y cristal.

También soy de los que piensan que pagamos justos por pecadores. Y que había otras soluciones antes de llegar al extremo de un Gran Hermano, pero el incivismo de unos y la falta de rigor de otros, nos ha llevado a ello.  Ni aumento de contenedores ni gratificaciones.  Aumento de costes, repercusión en los impuestos y como no, mayor regulación y menor comodidad al usuario.  Un estado policial encubierto bajo el epígrafe del cambio climático si es preciso. O del negocio de las empresas de tratamiento, vaya usted a saber.

Y el señor de la furgoneta sigue ahí, día sí, día no.  Además, delante tiene un paso de peatones que le facilita su parada y desalojo. No puede pedir más.  Y no me preocupa su quehacer porque a las ocho de la mañana ya se le han sumado las bolsas de algunos vecinos que al marcharse a trabajar también depositan sus restos que hubieran podido depositar la noche anterior. Me preocupa cómo se adaptarán a partir de noviembre, cuando estos últimos contenedores sean retirados de la vía pública y sí o sí las bolsas deban depositarse por la noche, cada una delante de su portal, identificadas con su correspondiente pulsera de presunto delincuente.

¿Progresaremos adecuadamente o seguirán existiendo puntos alegales e ilegales de despojos tanto domésticos como industriales? ¿Aumentará el rigor de la cosa pública o se nos intimidará con más cámaras de dudoso funcionamiento?

Al final, entrarán en el redil.

PUBLICADO EL 16 DE MAYO DE 2024, EN EL DIARIO MENORCA.

¿MENORQUÍN? PUES SÍ

 

Cuando oí decir al amado líder que asumía el compromiso de liderar el debate sobre la regeneración democrática, me alegré.  Pensé con Pilar Rahola, quien a la mínima ocasión menciona los referéndums con los que conviven en Suiza.  Sin duda, España está muy lejos de ser un país democrático en el que se cumpla aquello de un ciudadano, un voto.  Aquí ocurre todo lo contrario.  Las minorías son arrinconadas, despreciadas, insultadas, a no ser que, como le ocurre a Sánchez con algunas, las necesite.

Al unísono de esta mal llamada “regeneración democrática” -van a prohibir más que a liberar, y si no, tiempo al tiempo…-, en Baleares se ha dado otra demostración más de este desprecio a las minorías.  Y digo minorías porque no hay referéndum que nos cuente.

Cuando oí decir al Govern Balear que el catalán era nuestra lengua, ya no me alegré tanto.  Nada, mejor dicho.  ¿Se atreverá el PP a llevarlo en su programa electoral?

Y es que quienes apostamos por llamar a nuestra lengua como menorquín, mallorquín, balear y demás, somos tildados de ultras, antisistema, negacionistas, y porque no, fascistas.  Además de incultos.

¡Faltaría más! ¿Acaso los incultos, los negacionistas, los fascistas -puestos a decir burradas- no tenemos derecho a contabilizar nuestros votos a favor o en contra de una posición determinada?

La excusa sobre el catalán o el balear es que la autoridad entendida es la Universidad y el Estatuto así lo define.  Y lo mejor de todo es que “científicamente” está demostrado.  ¿Se dirá “científicamente” porque fue un químico -y no un filólogo- quien redactó la gramática catalana de referencia? ¿Y por qué no nos dejaron votar el Estatuto?  ¿Dónde reside la soberanía de los baleares?

Ahora cuando los progres de bien intentan quitar el Poder Judicial a los propios jueces, por aquello de que los poderes residen en la soberanía popular; ahora que el mando de la defensa reside en un político que ni ha hecho la mili; ahora que un gerente de un hospital no necesita ser médico; ahora que para dirigir una cátedra no necesitas ser licenciado, ¿por qué para decidir cómo quieres llamar a tu lengua, necesitas ser lingüista, filólogo, procatalán y progresista?

Otra cosa sería que luego discutiéramos como llamarla, si balear, mallorquín, ibicenco, menorquín o mahonés.

De momento, gracias al químico Fabra, Mahón, se ha quedado sin “h”.  Y sus defensores, tildados de incultos y fascistas.

Esperemos que, con esta regeneración democrática prometida, se nos depure para bien. Jajaja.

PUBLICADO EL 9 DE MAYO DE 2024, EN EL DIARIO MENORCA.

RINCÓN DE PENSAR

 

Quería tomarme la semana de vacaciones, vamos “hacerme un Sánchez”, pero no.  Escribo en domingo, a primerísima hora de la mañana.  Acabo de poner la lavadora y de leer Es Diari.  Dos hechos que provocan que, de parar, nada de nada.  El Sorprende y no sorprende nos hace saber que el lunes, día 29, es la festividad de san Pedro Mártir y la expresión de que “los trapos sucios se lavan en casa” de la que solía hacer gala un antiguo jefe mío, me ha devuelto a la realidad y quedarme sin vacaciones.

Un tercer hecho, aparece también en escena.  Desayuno mientras tecleo este escrito.  Y de chorizo. Pero no, hay que ser honestos con uno mismo.  La decisión ya estaba tomada.  El chorizo ha venido después.  Casualidad…, puede.

Y la verdad es que me preocupa la salud de nuestro amado líder.  Me preocupa no por él, sino por nosotros, sus administrados.  ¿Se imaginan que el poder que le hemos otorgado a golpe de Decreto-Ley esté en mente enferma? Ya nos encerró durante bastantes meses de forma anticonstitucional. ¿Qué puede ser lo próximo?

¿Era necesario darse unos días de reflexión? ¿Estrategia, espectáculo, infantilismo, victimismo?  ¿A quién pretende engañar?   A los suyos, claro.  ¿Tendrá algo que ver que la justicia española reabra el tema del Pegasus? ¿Tendrá algo que ver la intentona de reconocer a Palestina?

Begoña y Pedro son los únicos que saben lo que han hecho.  No importa reflexionar nada.  Lo hecho, hecho está.  Otra cosa muy distinta es saber qué saben los demás.  Aquí no podemos aplicar el famoso “rincón de pensar” al que se suelen mandar a los críos para que recapaciten, para que corrijan sus comportamientos, para que se amolden al entorno.  Begoña y Pedro ya lo saben.

El baño de masas me recuerda a la inquebrantable adhesión del pueblo español en los años setenta a su líder de entonces.  Y también amado en aquellos tiempos.  Y con autobuses llegados a la capital de todas las regiones españolas.  Y con bocadillo.

Poco ha cambiado desde entonces el modo en que se movilizan las masas.  Atrás quedó el miedo a perder las pensiones si ganaba la derecha, cada vez que Alfonso Guerra arengaba a sus fieles.  Ahora, según Pedro Sánchez y sus asesores seguidores, son la derecha extrema y la extrema derecha los peligros que nos acechan.

Y luego sale Zapatero a defenderlo, cuando él fue quien hablando con Gabilondo -vaya dos que se juntaron- inventó aquello de que “nos conviene que haya tensión”.  Pues sí, tensión hayla.  ¿Y quién la provoca?

Vayan al rincón y piensen.


PUBLICADO EL 2 DE MAYO DE 2024, EN EL DIARIO MENORCA.