Cuando la
política aparece en escena lo corrompe todo.
Incluso la lengua, el idioma, el habla salen perjudicadas. Y, si además los personajillos que forman
parte de estas políticas carecen de la más mínima integridad personal, no hay
mucho más que añadir.
Hace unos
días, viajando de página en página en eso de las redes sociales, me vino un flas
de asombro por no haberme dado cuenta antes.
Sí, es como aquella solución que la tienes delante, pero que infectados
como estamos con todo el catalanismo reinante no reparas en que la solución es
más fácil. Más sencilla, vamos.
Y te
preguntas ¿Por qué el Diccionari Català-Valencià-Balear de Borja Moll de entre
otros autores, diferencia en el nombre las tres lenguas? ¿Por qué no habla del
Diccionari Català que se habla en Cataluña, Valencia y Baleares? ¿Acaso cuando
empezaron a crear el diccionario estaban convencidos que eran tres
idiomas-lenguas-dialectos diferentes? ¿Acaso no decía Borja Moll por aquellos
tiempos que los tres eran dialectos del Lemosín? ¿Qué le hizo cambiar de
opinión? ¿Fueron el yugo y las flechas lo que le provocaron que se aliara por
un catalán superior en detrimento del valenciano y del balear? Vamos que la desmemoria histórica afectaría a
más de uno….
Y es que fue
en el año 1959, cuando mandaba el dictador Franco y era además jefe de los
falangistas, cuando se decretó que el balear pasaba a ser dialecto del
catalán. ¡Vaya por Dios! ¿Eso no lo
puede anular la desmemoria histórica?
No voy a
juzgar el pasado falangista de Moll.
Allá cada uno con los demonios de su pasado. Pero lo que sí hay que reconocer es que
actitudes personales de unos condicionan la herencia de todo un pueblo. Baleares se ha quedado huérfana de lengua por
una traición tan simple como la que algunos llamados lingüistas, químicos y
demás, un día, varias décadas, siglos ya, se conjuraron para vender, copiar y
pegar como diríamos ahora, los textos de gramática mallorquina y la llamaran
catalana.
Y si el balear, el menorquín, el mallorquín han perdurado hasta nuestros días no ha sido gracias a estos filólogos, químicos y demás gente de pacotilla, sino gracias a nuestros abuelos, padres y demás gente de pueblo llano que ha seguido manteniendo y transmitiendo la lengua que recibieron de sus padres y abuelos. Y como no, a todos estos empecinados amantes de lo nuestro que, a pesar de recibir insultos y desprecios, mantienen el espíritu de recuperar y perdurar la esencia de nuestras raíces y de nuestra historia y lengua común.
PUBLICADO EL 5 DE OCTUBRE DE 2023, EN EL DIARIO MENORCA.