EL SEXO EN EL DNI

 

Hubo un tiempo en que la profesión, el grupo sanguíneo y el estado civil de uno tenía su campo en el DNI.  “Sus labores”, “jubilado” y “estudiante” eran “oficialmente” reconocidos como profesiones, aunque desconozco si los términos “en paro, en desempleo o en busca de empleo” tendrían cabida en dicha terminología.   Y más difícil de aventurar sería si los actualmente términos “político” o “conseguidor” tendrían o no acceso en dicho campo.

Y del estado civil, más de lo mismo.  ¿Qué le importa a la administración si una persona es viuda, casada, divorciada o rejuntada?  Para esto están los corrillos y las “viejas del visillo” del lugar, que al más puro estilo de Maruja Alonso Pedrete o de Venancia Lengüete, se encargarán de identificar a cada uno de nosotros con su parecer y bien conocer.

Y el grupo sanguíneo desapareció también de su campo, uno ya no sabe si por ser más fiables las pruebas cruzadas o por la confidencialidad del historial médico.  Quién sabe si algún día el registro de las pruebas de ADN serán de obligado cumplimiento y relleno.

Van pasando los años, se van renovando los formatos, se añaden “chips” y demás términos “Smart” y el campo identificativo del sexo del ciudadano perdura. Salvo el periodo comprendido entre 1962 y 1981 en que se suprimió del documento, éste volvió a quedar anclado a principios de la década de los ochenta.  Salvada la polémica puntual sobre la nomenclatura del sexo Masculino/Femenino; Macho/Hembra; Hombre/Mujer; Varón/ Hembra; Varón/Mujer, sigue siendo de obligado cumplimiento el relleno del espacio dedicado a este campo.

Ahora, tas la aprobación de la Ley 4/2023, de 28 de febrero “para la igualdad real y efectiva de las personas trans y para la garantía de los derechos de las personas LGTBI” y con -por el momento- veintitantas identidades sexuales reconocidas, deberían entender nuestros gobernantes que además de atentar contra la libertad de identidad sexual de uno, atenta también contra uno de los derechos más sagrados reconocidos en la Constitución.  Si no queda registrado las apetencias políticas de cada cual, ¿por qué es necesario reconocer públicamente las apetencias sexuales de los mismos?

Y lo curioso del caso es que el feminismo propagandístico no ha pensado en suprimir esta declaración sexual en la ficha personal de cada uno.  ¿Esperarán a presentar alguna rectificación en fecha más próxima a las elecciones o esperarán a la víspera del próximo 8-M?

¿O crearán la polémica para desviar las noticias menos favorables?

PUBLICADO EL 30 DE MARZO DE 2023, EN EL DIARIO MENORCA.

NO ES MAGIA, SON TUS IMPUESTOS

 

Según datos del CIS más del ochenta por ciento de los españoles no cree que los impuestos se recauden con justicia.  Nada dice del porcentaje que no aplaude la forma del reparto en el gasto.

Tras el destape público del caso Mediador con la siempre supuesta corrupción del PSOE, la inminente campaña de la Renta y las elecciones del 28-M a la vuelta de la esquina, el ministerio de Hacienda inicia una campaña publicitaria para sensibilizar a la población sobre el valor social de los impuestos.

El eslogan escogido es que “No es magia, son tus impuestos”.  Sofía, Paco y Adela ponen cara a esta campaña sensibilizadora.  La beca para el estudio y la formación, la ayuda al deporte paralímpico y la dependencia -o independencia- de los mayores.

La respuesta del ciudadano no ha tardado en aparecer aportando la cara de dos personajes más: Sanidad y Educación.  Sanidad y Educación no son ministerios ni ramas de la sociedad.  Sanidad y Educación son la cara de dos “señoritas de compañía” puestas de moda por el caso de Tito Berni y la sospechosa presencia en el entramado de la Fundación Internacional Iberoamericana dependiente del Gobierno de Pedro Sánchez.

Lo que no dice el anuncio publicitario es que Sofía tal vez acabe emigrando al extranjero en busca de un trabajo en el que se le reconozca más su valía, una vez termine el doctorado que cursará gracias a la beca salida de los impuestos de algunos.  Si fuera así ¿se le exigiría la devolución del gasto invertido en su formación?

No es magia, pero sí que parece que hacen malabares algunos políticos, personal allegado y personas de confianza, en el manejo de los caudales públicos.  Da la sensación de que el dinero público no merece fiscalizarse y que se pueda dar a las amistades sin control alguno.  O al menos, gozando del derecho de interpretación de las normas. Y ahora con la “despenalización” de la malversación, no digamos.  Vamos, como Juan Palomo.

Y sí, fueron nuestros impuestos los que hicieron posible que un número indeterminado -por el momento- de representantes políticos participaran en fiestas con “señoritas de compañía”.  Flaco favor habrá hecho a la política feminista de Pedro Sánchez, pero eso ya es cosa en clave interna.  O de secretos de alcoba, vaya usted a saber.

De momento, en Baleares, Sanidad y Educación -y no precisamente las “señoritas de compañía”- se llevan lo mejor de los dineros públicos.  Y sólo por ir a las elecciones en paz.  Vamos, que los partidos del Govern también salen beneficiados con ello.


PUBLICADO EL 16 DE MARZO DE 2023, EN EL DIARIO MENORCA.

ANARQUISMO DESCAFEINADO

Creo no equivocarme si digo que los grupos actuales, abanderados de la filosofía anarquista, son grupos descafeinados.  O al menos los que pululan en España.  Vamos, que su anarquismo es más propagandístico que real.  O al menos sobre el papel.  La cara y no la cruz de la misma moneda.  ¡Como aquel que llegó al infierno estando en época electoral!

Según la definición de la RAE, anarquismo es la “Doctrina que propugna la supresión del Estado y del poder gubernativo en defensa de la libertad absoluta del individuo”. Vamos, lo que sería la ley de la jungla o la ley del más fuerte.  Si suprimimos el Estado y el poder “legal y democráticamente” instituido, volveríamos a los años treinta en que los pistoleros de uno y otro bando intentaban arreglar sus diferencias.  Y eso es historia.  Y para muy pocos, aún memoria.  ¿Acaso hemos llegado a un nivel tal que todos seremos buenos y no importará que nos impongamos normas de convivencia?  Lo otro, es pura utopía.

También es verdad que, en una democracia como la nuestra, mientras los llamados “anarquistas” no infrinjan las leyes -vamos que los pistoleros no salgan a la calle-, tienen el mismo derecho a participar en el juego democrático.  Lo contradictorio es que, para suprimir el poder, primero tengan que alcanzarlo -y además de forma democrática-. ¿Se imaginan un Congreso de los Diputados con la mitad más uno -o los que sean necesarios- votando la supresión de ellos mismos?

Adolfo Suárez consiguió que los Procuradores de las Cortes del régimen de Franco se hicieran el harakiri. Pero Suárez lo tenía “atado y bien atado” -por algo había sido ministro Secretario General del Movimiento-.  Y fue así, que el Estado en vez de suprimirse se fortaleció asumiendo un rol más o menos democrático.

El anarquismo, en un estado democrático es contradictorio, pero no imposible.   Alemania lo consiguió en 1933 y Asturias en 1934 -o al menos eso nos vendieron quienes escribieron la historia en algún momento-.  Pero las consecuencias de la Alemania de los años treinta y del octubre rojo en Asturias debería ser por todos-todas-todes conocido.

Otra cosa será que este anarquismo descafeinado -también llamado anarcosindicalismo- sea como el lobo disfrazado de oveja.  Y de lobos y zorros están las fábulas llenas.  Y de ovejas y gallinas también.  Es hora pues de dejarnos de cuentos, y trabajar para asegurar y fortalecer los pilares democráticos de nuestra sociedad.  De lo contrario, los valores democráticos están en juego. 

En peligro, más bien.

PUBLICADO EL 16 DE MARZO DE 2023, EN EL DIARIO DE MENORCA. 

LA GÜRTEL DEL PSOE

Son las personas y no los partidos políticos los corruptos.  Y eso es válido tanto si hablamos de partidos de derecha como de izquierda.  De extremos o de medias aguas.  De ricos o de pobres.  De monárquicos o de republicanos. De religiosos o de ateos.  Y como no, de hombres, de mujeres o demás.

Ahora, de nuevo le ha tocado el turno al PSOE lidiar con el trabajo de quitar las manzanas podridas de su cesto.  Pero el PSOE como partido juega con ventaja.  No están solos.  Ni creo que ningún juez dicte unos comentarios como los introducidos en su momento por el juez De Prada en su sentencia de la Gürtel.  Y, además el delito de malversación -gracias al PSOE y a sus socios- ya casi no existe.  Vamos, que está “casi” despenalizado.  Y ya no digamos del apoyo condicional que tiene de sus “amigos” de investidura.

Y son las personas y no los partidos, cuando los políticos -como personas- ante investigaciones sobre irregularidades detectadas, las califican de “deficiencias o irregularidades de procedimiento administrativo” o que “las urgencias que generó la pandemia motivaron comprar sin contrato previo”.  ¡Bendita pandemia!, debió pensar algún amigo empresario del bando vencedor.

Vamos que -para algunos políticos- incumplir la ley es una causa menor, porque claro, hay leyes y Leyes.  Y eso que las leyes -y sus trabas- se hicieron -cuando se hacían bien- para eso mismo, para evitar lagunas legales, atajos interesados, aprovechamientos presuntamente ilícitos… Y junto con las leyes de ámbito administrativo, en su momento también se “inventaron” los secretarios, los interventores y los depositarios o tesoreros, funcionarios todos éstos llamados de “habilitación nacional” para velar por el buen funcionamiento de la administración.

Y no hay mejor forma para destruir un edificio, que una voladura controlada. Una quinta columna creciente con fondos públicos, minada y abonada con el tiempo.  El puenteo a quienes dan fe y advierten de la ilegalidad, la excusa siempre presente de la pandemia, los pactos electorales que fabrican gobiernos débiles y, sobre todo, la falta de honradez en algunos casos, y de conocimiento en otros, hacen el caldo que nos sirven en los medios de comunicación, día sí, día también.

Puede estar tranquilo el PSOE porque está en fase de instrucción.  Quedan años para la sentencia.  Las elecciones están cerca y “sus” medios están alentados.  Y si aún así, fallaran, siempre tendrá a los independentistas y filo-etarras dispuestos a darle su voto por …, un puñao. 

PUBLICADO EL 9 DE MARZO DE 2023, EN EL DIARIO MENORCA.

UCRANIA vs ESPAÑA

Ucrania lleva ya más de un año defendiéndose heroicamente de Rusia, de Putín, y de las ambigüedades de bastantes.  Y sus gentes, en variedad de situaciones.  Unos han huido hacia otros países en busca de refugio.  Otros siguen allí, defendiendo su libertad, pasando las penurias propias de una guerra, muriendo en los bombardeos y en los campos de batalla. Y Ucrania está cerca.  Y Rusia también.

El egoísmo propio hace preguntarme sobre lo que nos pasaría si Rusia invadiera España.  Es difícil saberlo.  Para algunos miembros –“y miembras”- del Gobierno, Putín es un fascista, pero a la vez se niegan a entregar armas a Ucrania.  ¿Ayudamos a Ucrania para que se defienda de este “fascista rojo” o nos mantenemos amigos y neutrales por si las moscas?  No me imagino a la ministra de Igualdad metida en un traje militar y empuñando un arma contra los invasores.  Ni me imagino a Pablo Iglesias conduciendo un TOA hacia la avanzadilla del invasor.  Me imagino -eso sí- una nueva campaña publicitaria del ministerio de Igualdad: “Haz el amor y no la guerra”, mientras algun@s preparan las maletas para huir hacia Venezuela.

No me lo imagino porque dudo de la voluntad en algunos personajes del coro que acompaña a Pedro Sánchez de defender a España ante una invasión exterior. O interior.  Por dudar, incluso dudo de la intervención del Papa Francisco, dada su ambigüedad en el principio. O la incomprensión nuestra.

¿Huir o luchar en defensa de la libertad? ¿Huimos todos?  Querría equivocarme, pero en un país en que los independentistas catalanes contactaron con los rusos para que les ayudaran a conseguir la independencia y en el que parte del Gobierno habla de negociar, parlamentar y desmilitarizar la sociedad, el verbo “luchar” habría sido borrado -por decreto ley- del diccionario, mal que le pesara a Pérez-Reverte.  ¿Quiénes lucharían entonces? ¿Los hombres, mujeres y demás o sólo los hombres?

¿Nos ayudarían las antiguas Brigadas Internacionales o éstas seguirían afines a los rusos? ¿Negociar, rendirse o luchar?  ¿Negociar, el qué? 

Al final, quienes se quedarían luchando serían los pobres por no haberse podido pagar el viaje al extranjero, los nouvinguts y la extrema derecha. Los socialdemócratas -centro izquierda- y la derecha, puede que también.  La izquierda y su extrema, no los busquen, que o bien dialogan o bien ya lo tienen decidido.  Allí veríamos los verdaderos patriotas.  Con banderitas o sin ellas.

Pero por si acaso, mejor será que no vengan los rusos…  Ni de vacaciones.


PUBLICADO EL 2 DE MARZO DE 2023, EN EL DIARIO MENORCA.