EL REY NO PUEDE

 

La visita de los reyes, de Sánchez y de Mazón a Paiporta, fue accidentada.  Inoportuna, dirán algunos.  Necesaria, otros. Lo cierto es que una vez que Sánchez huyó y los reyes recondujeron la situación, pudimos darnos cuenta de lo que realmente representa la monarquía en España.

Una inmensa mayoría de españoles desconocen cuál es su papel constitucional.  El antiguo y conocido dicho de que “el rey reina, pero no gobierna” lo define a la perfección.  Un presidente de la República tendría mucho más poder que el que tiene Felipe VI.  Su función es puramente representativa y simbólica.  Incluso la jefatura de los ejércitos de la que todos creemos que recaen sobre él, no es así.  Esta jefatura recae en el presidente del Gobierno y en la ministra del ramo.  Y punto.

Si Felipe VI hubiera sido el jefe del Estado en una hipotética república española, podría haber “mandado” a Pedro Sánchez a actuar en un determinado sentido en la tragedia valenciana.  E incluso haberle destituido.  Pero el rey no puede. No tiene más poder que el que la Constitución le otorga. Representación y firmar lo que otros deciden. Y punto.

Una vez Sánchez huyó del escenario, y los reyes pudieron conversar con los ciudadanos de Paiporta, éstos le reprocharon la mala gestión de la catástrofe por parte de las instituciones.  La reina consorte, sin papel constitucional que la obligue, dio la razón a los que la tenían.  Ni eso pudo hacer el rey.  El rey, como representante último del Estado, tuvo que aguantar la repulsa de los -y con motivo- exaltados ciudadanos, intentando apaciguar los ánimos.  Ni una palabra, ni una mueca, ni una señal en contra de los gobiernos ni de sus presidentes, demostrando que la Institución está por encima de las personas. Y de las diferencias.

La Corona no huyó como vil cobarde, sino que se comió un marrón que no era suyo. Aguantó la indignación, consoló a quien quiso ser consolado, y la reina, esta vez también estuvo a la altura que se le espera.  Ella sí que se sinceró más de lo que debía.  Fue el yin-yang a veces necesario.

Por no poder, ni pudo viajar cuando quiso ni con quien quiso, ni por supuesto poner a disposición su Guardia Real, sin previa autorización política.  Esta es la diferencia entre la monarquía y una hipotética república en España.  Aunque en este caso, la monarquía apaciguó y consoló al pueblo, mientras la hipotética república por algunos soñada estaría con Sánchez al mando, y como está demostrado, los hubiera provocado e incendiado aún más.

Como se ve, la institución sirve más a la causa común que un político con intereses partidistas y personales.


PUBLICADO EL 14 DE NOVIEMBRE DE 2024, EN EL DIARIO MENORCA.

¿ESTADO FALLIDO?

 

Es triste, sí, pero me avergüenzo de tener los políticos que tenemos. Me avergüenzo de tener a un presidente que se llama Pedro Sánchez.  Me avergüenzo de tener como líder de la oposición a Núñez Feijóo. Y como no, del presidente de la Generalitat valenciana.  Demasiados “errores” entrecomillados en tan poco tiempo. Demasiada presunta -de momento- negligencia.  Y sobrados, unos.  A la espera, los otros.

Mientras escribo estas líneas se cuentan ya por cientos las víctimas.  Y son ya millares las estupideces que oímos y leemos en los medios de comunicación. Ataques indisimulados entre el Gobierno y la oposición. Contra la AEMET.  Y entre ellos mismos -delegada del Gobierno y el ministro de política territorial-. Tertulianos, sin conocimientos técnicos, diciendo de las suyas. Los unos contra los otros. Y mientras, Valencia destrozada.

Otros tantos, indiferentes. Lo demostraron a la mañana siguiente al no querer demorar el asalto a la RTVE. Aina Vidal, portavoz de Sumar, lo dejó muy claro: “Los diputados no estamos para ir a Valencia a achicar agua”.  Y se quedó tan pancha. Como tantos otros.

Pillajes sin control.  Las FCS sin planificación alguna para la catástrofe. Miles de desaparecidos. El ejército acuartelado a la espera de la orden que no llega. Mientras, cientos y cientos de cadáveres permanecen en el lodazal de la tragedia.  Los ciudadanos creando por su cuenta y riesgo patrullas ciudadanas para proteger sus viviendas y sus vidas. Kilómetros de voluntarios para achicar agua y lodo.  Horas y días incomunicados.  Sin luz.  Sin teléfono.  Sin ayuda.  Sin medicinas.  Sin comida.  Sin agua.   ¿Tan difícil era trasladar generadores y repetidores? ¿Dónde estaban las ONGs? ¿No había foto que hacer?

¿Es España un Estado fallido o ya ha colapsado? Por suerte, aún existe la solidaridad del pueblo. Un pueblo que sin organización previa se pone en marcha. ¿Seremos capaces de al menos aprender de los fallos que tantos cientos de muertos ha ocasionado? ¿Habrá ceses y dimisiones? ¿Habrá responsabilidades penales o se finiquitará con otra amnistía?

Deberemos tomar conciencia de que unos votos, por muy democráticos que sean, no invisten de sabiduría. Ni de bondad. Los políticos no tienen por qué saber.  Ni saben. Y lo demuestran.  ¿Dónde están los técnicos? ¿Dónde están los profesionales?

El Estado es algo más que magia e impuestos mal gestionados.  La gestión ha sido dantesca.  Tercermundista.  ¿Qué pasará si algún día nos invaden o atacan?  ¿Dirá Aina Vidal que los diputados no están para defendernos?

Quien no los defenderá va a ser uno que yo se. ¡Que se apañen ellos!


PUBLICADO EL 7 DE NOVIEMBRE DE 2024, EN EL DIARIO MENORCA.

EL CASO ERREJÓN

 

A ZP le crecieron los enanos. Ahora es a Pedro Sánchez a quien le crecen. Y la nariz, y las sospechas de corrupción, y el #MeToo…  Y él resiste.  Su manual parece dar sus frutos, aunque no fuera escrito por él.  Tal vez, por eso mismo.

Mientras, la maquinaria gubernamental a su servicio y al de la doña, actúa para contrarrestar el fango propio: Control férreo de la televisión pública; Oficiales generales que supervisarán las investigaciones de la Guardia Civil y combatirán la maquinaria de los bulos anti-Sánchez; eliminación de requisitos para el acceso a las unidades adscritas a la Policía Judicial… Vamos, desmontar las estructuras de lo que aún queda del hipotético Estado de Derecho y de la independencia funcionarial.

Mientras, todo sigue su curso, más rápido, más lento. La nueva normalidad de la que nos prometieron que saldríamos de la pandemia, sigue dando sus frutos. Aun así, la semana pasada saltó la bomba.  Otra bomba. El niño mimado por los medios había hecho de las suyas. Muchas suyas, según parece.

Iñigo Errejón dimitió de la política.  La persona y el personaje no andaban a la par.  Excusa barata y, sobre todo, victimista.  Machista, horas después. A su vez, el escándalo Errejón estalla.  Causa efecto.  Efecto causa.  Su caso estalló cuando la periodista Cristina Fallarás publicó en Instagram el testimonio de una mujer anónima que denunciaba haber padecido violencia sexual por parte de un político al que se refería como “el indignado social”. Poco después, Errejón fue denunciado ante la policía por otra periodista por tres presuntos delitos de violencia sexual. Y aún es posible que aparezcan más denuncias. Al tiempo.

Pero hubo más.  Polític@s quienes tuvieron conocimiento de ellas y no actuaron.  Aquello del patriarcado, del sí y sólo sí, y del todos, todas y todes, era mera fachada.  En pocas horas dimitieron algunas “lobbies feministas” por presuntamente haber encubierto las fechorías del niño mimado.  Y ahora, apestado.

La izquierda progresista ha perdido, si es que la tenía, toda autoridad moral para erigirse como único valedor de la mujer. De machistas, los hay por todas partes. Y a la izquierda incluso con género femenino.  Los machos alfas no son cosas del pasado.

Suerte que hay personas que, como Cristina están ahí para ayudarlas, aunque Instagram le cierre la cuenta.  Y no como otr@s que los encubren.  Y ahora lo reniegan.

Y ya salen más nombres en los anónimos y no tan anónimos.  ¿Quién habrá detrás de todo el affaire?  ¿Habrá intereses políticos en el destape o no destape de alguno de los hechos?

El #MeToo, empieza.   Ánimo, y a por ellos.

PUBLICADO EL 31 DE OCTUBRE DE 2024, EN EL DIARIO MENORCA.

MASCARILLAS v 2.0

 

Suele decirse que “no hay mejor defensa que un buen ataque”.  Lo vemos un día sí y otro también cuando intentamos actualizarnos de lo acontecido desde la última vez que tuvimos noticia.  Noticia o desinformación, según sea el caso.

Cada vez que aparece un nuevo episodio de la presunta trama de Begoña y los suyos, aparece la contraofensiva oficial desmintiendo, tergiversando y desinformando sobre lo acontecido. Y los episodios ya son diarios.  ¿Estará en los sótanos de la Moncloa la verdadera máquina del fango? Al menos, la presunta mentira está en la boca de la ministra portavoz.  Mentira, engaño o desinformación.  De la ministra portavoz y del resto de miembros.

Hubo un tiempo en que intenté ser políticamente correcto.  Vamos que, en vez de llamarles mentirosos, decía que faltaban a la verdad.  Es lo mismo, pero duele menos.  Ahora tanto me da.  Prefiero ser políticamente incorrecto a que me llamen tonto o ignorante.

Y la oposición sigue estando apagada.  Desorientada y desinformada.  El último gol se lo metieron sin nocturnidad, aunque eso sí, con alevosía.  A pleno día. Con luz y taquígrafos.  Es verdad que su voto en contra no hubiera impedido la puesta en libertad de los asesinos de ETA, pero al menos hubieran hecho su trabajo.  ¿Qué hacen ahí sentados si no saben lo que votan? ¿Acaso no conocen cómo actúa su contrincante? Y no es el primer gol que les marcan.  Los arrestos domiciliarios anticonstitucionales también fueron votados por la oposición. En Mahón, al menos han destapado el agua no potable. Aunque en Baleares, siguen convencidos con lo del catalán.

Quienes sí parecen destapar corruptelas son Alvise Pérez, Vito Quiles y sus ardillas. Y ¿será por ello por lo que todos intentan hacerles el vacío, como si un juego de niños se tratara? Los políticos, tanto derechas como izquierdas, los ignoran. Y los medios de comunicación, también.  ¿Por qué tantos en su contra?

¿Estará en funcionamiento otra mal llamada policía patriótica? ¿Se estará preparando un nuevo encierro a las libertades? ¿Se intentará apagar las noticias de presuntas corruptelas en el seno de la familia de Sánchez y de la calle Ferraz con un nuevo confinamiento?

De momento, las mascarillas están más cerca que lejos, de volverse a implantar.  Y esta vez a precios de saldo. La ministra de la cosa ya tiene el borrador preparado. Ahora sólo falta que el resto, firme sin leer, o al menos, sin entender.  Y de eso saben un mogollón.

Y antes de que me llamen negacionista les diré que ya me he vacunado doblemente.  Y contra la política, sólo con la terapia semanal en esta columna ya estoy inmune.

PUBLICADO EL 24 DE OCTUBRE DE 2024, EN EL DIARIO MENORCA.

NÚMERO 1

Esta vez no ha habido incógnita que despejar.  Todos sabemos quién es el número 1, el macho alfa del Gobierno de España.  Tampoco hay duda del mensaje.  El “Luis, se fuerte” a Bárcenas es un juego de niños respecto al “bien” de Pedro Sánchez autorizando a Ábalos para que se reuniera con la vicepresidenta de Venezuela pese a tener prohibida su entrada en Europa. Y menos mal que este “bien” va sin signos de exclamación que, si no, ya se carga el muerto el corrector del móvil.

En su día se habló y mucho de las presuntas maletas que entraron en España sin control alguno. De oro, de aerolíneas, de negocios en paraísos fiscales…. Y se contraatacó, como no, creando el fango y la máquina que lo producía, culpabilizando de ello a quienes no profesan la religión social-comunista, a los pseudomedios, y a los mal llamados agitadores ultras y fabricantes de bulos.  Sólo les faltó implantar la censura previa y el TOP.

Se amenazó incluso con cerrar medios hostiles al Gobierno y a perseguir a los autores de publicaciones en redes que fueran disidentes a la verdad oficial emitida por el Gobierno del marido de Begoña. Fueron tiempos convulsos para Pedro Sánchez, sin duda.  Y sólo fue el principio.  Los casos de su hermano y de su esposa, pronto salieron a la luz.  Los presuntos casos, claro está.  O del “no caso” como viene defendiendo su ministra portavoz.

En tiempos de Franco, la disidencia recomendaba leer los periódicos extranjeros para que uno se enterara de la verdad de lo que ocurría en esta España nuestra.  Ahora, en tiempos de la globalización y de tanta mentira vertida desde la cúspide del poder, las redes sociales son un bien al abasto de todo el mundo para, tras un trabajo previo de filtraje, obtener algunas pistas para llegar a la verdad comprometedora.

¿Qué hubiera pasado si en la Constitución española no se contemplara la figura jurídica de la “acción popular” y sólo pudiera acusar el fiscal?  Sólo falta recurrir a la respuesta de Pedro Sánchez al contestarse a sí mismo sobre de quien dependía la fiscalía.

¿Aparecerá alguna mención a un presunto número 0? ¿Existirán negocios opacos de españoles en Venezuela? ¿Se imaginan este “no caso” en una España republicana con ZP de presidente de la República y Pedro Sánchez del Ejecutivo?  ¿O seríamos una república presidencialista? Sin duda, conociendo a Pedro Sánchez, España sería una república presidencialista, al más puro estilo de Juan Palomo.

De momento, los medios afines van sacando cintas del emérito y la Bárbara.  ¿Será el “kompromat” de su “manual de resistencia” o simplemente un capítulo del “arte del despiste”?

PUBLICADO EL 17 DE OCTUBRE DE 2024, EN EL DIARIO MENORCA. 

POTABILIDAD DOMICILIARIA

Desgraciadamente Mahón y su agua -su potabilidad- han sido noticia en las últimas semanas.  Meses dirán algunos. Se ha hablado de expedientes, dimisiones, comisiones y explicaciones. Siempre habrá algún chivo expiatorio.  Alguna solución interesada. Otras interesantes.  Algún tiempo pasado fue peor. Y el "tú más" que no falte.

Hubo un tiempo en que las culpas recayeron sobre las piscinas.  En otro fueron los purines.  Las fugas y el malgasto, otro que tal.  El cambio climático. El turismo y la oferta ilegal. Vamos, el vecino de mi vecino y el del cuarto segundo y su agenda 2030.

No voy a hacer leña del árbol caído.  Las comas quedaron hace años fuera del sujeto y del predicado. El punto y la coma se vengaron. Rebeldía a la prepotencia demostrada.  Y el San Martín que siempre llega.

La no potabilidad del agua no es de ahora.  La ineficacia en cuanto a solucionar el tema tampoco.  Y nada han avanzado.  Bueno sí, el vocablo fácil.  La derivación de funciones. Parcheando que es gerundio.  Y la factura, la misma o más. Con o sin nitratos el agua se vende a buen precio, al más caro, al de potable, aunque ésta no lo sea. Barrios desnitrificados y barrios nitrificados.  Otra desigualdad de nuestros gestores.  Barrios ricos, barrios pobres, dirán algunos.

Y la potabilidad no es de ahora.  La base 11, 1-c) de la Ley de 17 de julio de 1945 de Bases de Régimen Local estipulaba que una de las competencias municipales era la del agua potable.  El decreto de 24 de junio de 1955 del texto articulado y refundido de las LBRL vuelve a mencionar como competencia municipal el abastecimiento de aguas potables.  También lo recoge el artículo 25 de la ley 7/1985, de 2 de abril, Reguladora de las Bases del Régimen Local.  Y más próximo es también el artículo 25 de la Ley 27/2013 de racionalización y sostenibilidad de la Administración Local, dónde ya de forma inequívoca habla del abastecimiento de agua potable a domicilio.  Ni abrevaderos ni fuentes desnitrificadas.  ¡A domicilio!

Sin duda, la dejadez de funciones en el abastecimiento de agua potable a domicilio es un hecho. Algunos dirán que es un engaño al ciudadano, al pueblo, al vecino de antaño. El coste económico también es un hecho. Una usura de ahora y de hace ya algunos años.  Soluciones pocas o ningunas.  La opacidad mala señal. La botella embotellada y sin retorno.

¿De verdad tenemos recursos para identificar las heces de un perro o la basura del vecino del quinto tercera y no somos capaces de purificar el agua que deberíamos poder beber? ¿Dónde está la sostenibilidad de la ley?  Aquí sí que un tiempo pasado fue mejor. 

PUBLICADO EL 10 DE OCTUBRE DE 2024, EN EL DIARIO MENORCA.

BONO ALCOHÓLICO

 

Hace unos meses hubo un revuelo de los que sólo el Gobierno del marido de Begoña sabe provocar y fue cuando para desviar los titulares de las destapadas presuntas corruptelas del entorno de Ferraz apareció el globo sonda del llamado “bono porno” o popularmente bautizado como “bono paja”.  Según se dijo en su momento se trataba de un carné digital válido para treinta días y de treinta accesos.  Vamos, que al actual gobernador del Banco de España y por entonces ministro del marido de la Begoña se le debieron encender las bombillas al ver alguna luz roja por el camino.

Han pasado ya los meses, Escrivá ha pasado a mejor vida, han salido nuevos titulares de corruptelas y uno desconoce si el llamado “bono paja” ha entrado en vigor o por el momento espera a que llegue la Navidad por aquello de que Papa Noel vestido de rojo venga cargado de ellos.  ¿Se imaginan que en las campañas navideñas se regalaran esos bonos? ¿Acaso no se regalan bebidas alcohólicas y productos tabacaleros?

Y ahora, cuando el llamado cambio climático nos ha dejado sin verano, cuando las fiestas de pueblo han pasado también a mejor vida, el ministro Grande-Marlaska propone -al menos él lo hace público- reducir la tasa de alcoholemia para la conducción de vehículos.  Unos hablan de tolerancia cero y otros de bajar la tasa.  Sin duda, otro frente de despiste y todos a opinar sobre el tema.  Supongo que quienes beben tendrán algo que decir al igual que los restauradores y personal afín.  Y como no, el resto de los usuarios de la vía.   Al final serán, como siempre, los políticos quienes digan la última palabra.

Y uno se pregunta ¿por qué no imponer también el bono alcohólico o un registro parecido al de la ludopatía?  ¿Se imaginan que para consumir alcohol en un establecimiento de restauración o de bebidas tuvieras que acceder mediante un bono con un determinado número de consumiciones al día?

¿Se imaginan que, en las fiestas patronales de Menorca, las pomadas estuvieran limitadas a un numerus clausus? ¿Y la barra libre o el todo incluido?

Sin duda para el caso del consumo del alcohol y de los productos tabacaleros, el Estado tiene otras fórmulas más ventajosas.  La subida de los precios y los impuestos ya es suficiente terapia para que uno intente suavizar el consumo y que Hacienda no se resienta.  Ni el restaurador.  Vamos que, aunque el consumo baje las ganancias no se ven alteradas.

Así no es raro que la economía de nuestro país -con tesis plagiada con un color más bien oscuro- vaya como un cohete, aunque eso sí,  al marido de Begoña le hubiera faltado añadir aquello de “un cohete borracho”.

PUBLICADO EL 3 DE OCTUBRE DE 2024, EN EL DIARIO MENORCA.