En el último número en que me asomé a vuestro espacio me despedía con el propósito de tomarme un tiempo sabático. No ha sido así. O al menos, el periodo ha sido mínimo. Paco Orfila, a quien conozco desde hace más de un cuarto de siglo, ha sido esta vez el culpable. Una llamada suya me invitaba a volver al Boletín con las mismas condiciones anteriores –las que en su día me ofreció el siempre amigo Rafa Ayala-, a saber: mismo sueldo, paga de beneficios y vacaciones anuales pagadas. ¿Quién podía resistirse a tales proposiciones?
Eso sí, le condicioné que visto lo visto, las vacaciones no fueran en crucero, porque a lo mejor, aquel descanso sabático podría verse ampliado por los siglos de los siglos….
Y por si fuera poco, en la conversación me dio –sin él saberlo- el título del presente escrito. También es verdad que podría haber aprovechado una guía para cada mes, a saber, mes de febrero para la retórica de los amorados y enamorados, pero eso era ya demasiado repetitivo. Otros meses para el carnaval, Semana Santa, vacaciones, pero …, ¿por qué dedicar un mes y no todo el año al amoramiento-enamoramiento, al carnaval, a las vacaciones, al recuerdo de nuestros antepasados…,?. Y la culpa, pues el consumo. O la crisis. O ambas. O ninguna.
En cambio, el de Frente de Juventudes me gustó. Y no por rememorar viejos tiempos, porque siempre me he posicionado contra el poder establecido, sino simplemente por el término afable que lleva intrínseco al referirse a personas ya adultas y que gozan del merecido relax. Hipotético relax. Porque seguro que cuando no son los nietos, son los hijos, cuando no las excursiones, los cursos, y un largo etcétera que os tienen ocupados por - a la postre- no tener ni obligaciones ni ocupaciones.
Frente y juventud. ¿Qué términos podríamos usar para decantarnos de cualquier posicionamiento histórico o político y a su vez, utilizar este vocablo?. Sinceramente creo que del “frente” me quedaría con el de “semblante” . Y para la juventud, qué mejor definición que el de “energía, vigor, frescura”. Ambos, el semblante fresco, semblante lleno de energía, encuadrarían bastante en esta definición. Más que definición, realidad misma. Lo que sois, lo que profesáis.
Vuestro centro es un centro vivo. Vuestro boletín…. un espacio vivo. Vosotros, ya por sólo el hecho de mover cuerpo y trasladaros hasta este espacio físico, o simplemente por hojear estas páginas, ya estáis dando un semblante de vida, de tenacidad, de que todo lo que acontece os interesa y os motiva.
Aplaudiréis o reprobaréis, criticaréis, rectificaréis o incluso aprobaréis decisiones y comentarios, participaréis y diréis la vuestra, o simplemente callaréis como estrategia aprendida durante años de aprendizaje en esta vida en que uno nunca termina de aprender.
Y participaréis. Como activos o como espectadores, como miembros de la junta, o como votantes, pero vuestra voz, tanto activa como delegada, será vuestra representación, vuestra opinión, vuestra necesidad de comunicaros, de vuestra experiencia, y sobre todo, de vuestra sabiduría.
Y todo ello porque seréis también un Frente común cuando los intereses colectivos puedan más que los individuales, porque eso también os lo habrá enseñado esta Universidad de la vida, llámesela ésta Colársega, Trebeluger, o de más adentro. Y además, un frente joven, dinámico, con ilusión y sin necesidades de aparentar…
Y eso ya es mucho.
Eso sí, le condicioné que visto lo visto, las vacaciones no fueran en crucero, porque a lo mejor, aquel descanso sabático podría verse ampliado por los siglos de los siglos….
Y por si fuera poco, en la conversación me dio –sin él saberlo- el título del presente escrito. También es verdad que podría haber aprovechado una guía para cada mes, a saber, mes de febrero para la retórica de los amorados y enamorados, pero eso era ya demasiado repetitivo. Otros meses para el carnaval, Semana Santa, vacaciones, pero …, ¿por qué dedicar un mes y no todo el año al amoramiento-enamoramiento, al carnaval, a las vacaciones, al recuerdo de nuestros antepasados…,?. Y la culpa, pues el consumo. O la crisis. O ambas. O ninguna.
En cambio, el de Frente de Juventudes me gustó. Y no por rememorar viejos tiempos, porque siempre me he posicionado contra el poder establecido, sino simplemente por el término afable que lleva intrínseco al referirse a personas ya adultas y que gozan del merecido relax. Hipotético relax. Porque seguro que cuando no son los nietos, son los hijos, cuando no las excursiones, los cursos, y un largo etcétera que os tienen ocupados por - a la postre- no tener ni obligaciones ni ocupaciones.
Frente y juventud. ¿Qué términos podríamos usar para decantarnos de cualquier posicionamiento histórico o político y a su vez, utilizar este vocablo?. Sinceramente creo que del “frente” me quedaría con el de “semblante” . Y para la juventud, qué mejor definición que el de “energía, vigor, frescura”. Ambos, el semblante fresco, semblante lleno de energía, encuadrarían bastante en esta definición. Más que definición, realidad misma. Lo que sois, lo que profesáis.
Vuestro centro es un centro vivo. Vuestro boletín…. un espacio vivo. Vosotros, ya por sólo el hecho de mover cuerpo y trasladaros hasta este espacio físico, o simplemente por hojear estas páginas, ya estáis dando un semblante de vida, de tenacidad, de que todo lo que acontece os interesa y os motiva.
Aplaudiréis o reprobaréis, criticaréis, rectificaréis o incluso aprobaréis decisiones y comentarios, participaréis y diréis la vuestra, o simplemente callaréis como estrategia aprendida durante años de aprendizaje en esta vida en que uno nunca termina de aprender.
Y participaréis. Como activos o como espectadores, como miembros de la junta, o como votantes, pero vuestra voz, tanto activa como delegada, será vuestra representación, vuestra opinión, vuestra necesidad de comunicaros, de vuestra experiencia, y sobre todo, de vuestra sabiduría.
Y todo ello porque seréis también un Frente común cuando los intereses colectivos puedan más que los individuales, porque eso también os lo habrá enseñado esta Universidad de la vida, llámesela ésta Colársega, Trebeluger, o de más adentro. Y además, un frente joven, dinámico, con ilusión y sin necesidades de aparentar…
Y eso ya es mucho.
PUBLICADO en el número del mes de FEBRERO de 2012, en EL BULLETÍ DEL CENTRE DE PERSONES MAJORS. Area de Acció Social. Consell Insular de Menorca