UNA LEY SIN POLÉMICA…. AL MENOS, POR AHORA

Por ahora, y públicamente. Y es que nadie se atreve a decir lo contrario, no sea que les traten de maltratadores y que intenten hacerles caer todo el peso de la ley sobre los susodichos desacordes.

Y es que los legisladores se las traen. Así no es extraño que en el informe Pisa nos dejen en los últimos puestos. Y es que si los políticos y los interesados en el tema nos engañan de tan fácil manera, ¿cómo no se van a reír de nosotros en el exterior?. Una cosa está clara, pero. La culpa de todo es de Franco, o al menos así lo dicen las autoridades educativas quienes culpan a los padres educados en el régimen de Franco, por no saber educar correctamente a sus hijos…!!! Intentaremos no hacer cuentas, porque de hacerlas, a quienes no les saldrán será al ministerio, y en vez de cuentas, se les verá el cuento, pero bueno, dirán ellos que será cuestión de una letra, y no de números.

Y es que en un país donde nos hicieron creer que la pena de muerte había quedado abolida por la Constitución y casi todos se lo creyeron, es un país en el que todo es posible. Y miren si es posible que hasta, para quedar bien, como dijo en su día el ministro del ramo, se ha suprimido una frase, por aquello del cachete. ¿Pero saben de verdad qué es lo que se ha borrado?. Pues parece que no. De un plumazo, o mejor aún, de una votación política se ha suprimido que los padres “puedan también corregir razonable y moderadamente a los hijos”, ya que según información dada por el ministro del ramo, dicha referencia “había sido interpretada en algunos organismos internacionales como posible vía de amparo a la utilización de la violencia física hacia los menores, -y añade- y aunque “no era así”, más vale suprimirlo “por si acaso”.

Pues con este “por si acaso”, nos hemos pasado por el forro también al diccionario de la Real Academia de la Lengua. Pero bueno, cuando el informe Pisa deja claro que los españoles, de “comprensión lectora” nada de nada, sus motivos tendrá. Y empieza uno a creer que algo de cierto tendrá.

Así pues, para los señores legisladores, estos señores que cada cuatro años se enfadan y gritan para conseguir otros cuatro años de “arduo trabajo” sería bueno que los Reyes Magos les trajeran algún que otro ejemplar del diccionario de marras, y tal vez así, si de tanto en tanto lo usaran, podrían enterarse un poco de lo que dice la ley y no sólo moverse por los correveidiles extranjeros.

Y es que el término “corregir” no es lo mismo que “pegar, maltratar…”. Corregir según el diccionario al que nos referíamos significa “enmendar lo errado”, “advertir, amonestar..”. Y si rebuscamos, encontramos que el término “enmendar” significa “arreglar, quitar defectos”. Así de un plumazo nuestros sabios legisladores no prohíben, pero tampoco lo califican como deber o facultad de los progenitores el de enmendar lo errado por parte del menor, y por supuesto, el de quitar defectos. Pero hay más. ¡Vaya si hay más!.

. ¿Cómo corregir una conducta que se desvía de lo que se cree que debe ser la correcta y no ser denunciado en el intento? , se preguntarán muchos padres a día de hoy.

Y saldrán otros inspirados con soluciones de toda la vida…. Que si no darles la paga, que si no dejarles ver la televisión, que si no dejarles salir a pasear…… y quienes lo digan se quedarán tan panchos, seguro. Tan panchos y equivocados. ¿Saben estos señores iluminados que por el mismo hecho de haber quitado la frase de “puedan también corregir razonable y moderadamente a los hijos” si no dejan salir a un niño cuando éste quiera salir de su casa, se le podrá acusar de “detención ilegal”?. ¿Y saben que si amenaza con hacerlo, se le acusará de “coacciones” a un menor?.

Ahora faltará que algún inspirado -por no decir iluminado- se le ocurra que es necesario hacer un reglamento de orden interno para la educación de los hijos sujetos a la patria potestad de los progenitores. Si hay un reglamento disciplinario, un estatuto de trabajadores, un reglamento educativo, ¿por qué no establecer unas normas de conducta dentro del entorno familiar?. Pero bueno, para ello deberemos esperar…. , otro iluminado, otra injerencia extranjera, otro yo que sé…

Lástima que de las injerencias extranjeras sólo copiemos una parte, la más fácil, la más benevolente. ¿o será culpa de esta falta de comprensión lectora?. En Finlandia no hay delincuencia, no hay pintadas en las paredes, ni en los pupitres ni en los aseos, no se copia ni existen las chuletas…. ,

En España, incluso elevamos a cultura, estas pintadas urbanas. Aquí está la diferencia entre el norte y el sur. Y respeto a Finlandia, España está tanto geográfica como intelectualmente al sur. Muy al sur.
PUBLICADO EL 3 ENERO 2008, EN EL DIARIO MENORCA.